Cuando se trata de dar a conocer los productos gastronómicos mexicanos de forma nacional, se organizan entre los distribuidores y de esta forma buscan los recursos y el apoyo de las instancias correspondientes para poder realizar eventos, ferias e incluso convecciones que informen y expongan los platillos más sabrosos de la comida mexicana, cuya fama y sabor ha tocado los paladares más exigentes e internacionales.
El apoyo es esencial, muchas veces el gobierno da este apoyo a los productores y comercializadores de comida mexicana, a la cual se han dedicado la mayor parte de su vida. Pues si algo sabemos es que la comida como tal no pertenece a alguien y algunas familias pasan la tradición de generación en generación procurando la tradición, es por ello que muchos de los platillos famosos, clásicos y únicos se han dado a conocer.
Para que esto continúe, es por ello que se llevan a cabo las ferias de alimentos, donde se les invita a los comensales, tanto nacionales como de otros países, a asistir, de esta forma se da a conocer las cientos de variedades, que pueden existir tan solo de un solo producto. Pensamos que puede existir solo un tipo de frijol, un tipo de quesadilla o una sola forma de preparar el pozole, pero esto no es así.
Evidentemente esto no sucede, la variedad es extensa de productos, que no nos daríamos a basto el mencionarlos aquí. Un claro ejemplo es el paste, que últimamente se ha vuelto popular al salir de donde tradicionalmente se le solía conocer más, pues quien haya ido a Pachuca se dará cuenta que en esa región abundan los locales dedicados a ello. Pues el Real de Monte, lugar emblemático y considerado uno de los pueblos mágicos, donde se celebran las tradiciones suele ser el lugar donde se lleva a cabo la feria del paste.
También al visitar este lugar y darnos cuenta de su forma emblemática, estilo inglés, según nos explican los expertos del lugar, ya que las varias minas que yacían ahí le hacían ser un lugar de encuentros y trabajo. Actualmente sólo se usan como modelos para atraer a turistas y con el famoso tur del camión especial, se explica sus orígenes y de lo mágico que resulta el lugar, sin olvidar que parte de su gastronomía está basada en el paste.
Aquí se elabora el paste más grande del mundo con una medición de casi 5 metros. Para aquellos que han probado el paste, esta es una oportunidad que no se pueden perder, pues es considerado uno de los paraísos del paste con su extensa variedad para todos los gustos desde dulces y salados, pues los hay de: piña, mole, arroz con leche, hawaiana, salchicha, manzana, picadillo y tinga.
Sin duda, es una oportunidad tanto para los que conocen el producto y son amantes del producto y su sabor, como para aquellos que son primerizos, además de disfrutar del pueblo mágico y darse un placer al estómago: no está de más. Muchas veces se confunde el paste con la empanada, pero la diferencia radica en el interior, por que la empanada va pre-cocida y el relleno del paste va crudo para introducirlo al horno.
Cada año se procura innovar e introducir sabores nuevos, es interesante descubrir que habrá de nuevo este año, pero aseguramos que será un delicia y orgullo para gastronomía local de Real del Monte. La entrada es libre y las actividades pueden variar, mientras se realizan se puede acompañar de un paste.
Cabe resaltar que es un producto considerado económico, ya que oscila entre los 12 y 15 pesos, por lo que 2 pastes suelen ser suficientes para llenar el estómago, pero no afecta el bolsillo.
Si tiene dudas al respecto puede consultar a expertos en banquetes, ellos le atenderán de forma profesional si contrata sus servicios en este portal.